Esta línea de trabajo se enfoca en el estudio del modelo de desarrollo actual y futuro y en la participación de las distintas actividades económicas de Avellaneda en la generación del producto bruto local. En función del análisis del perfil de la ciudad que tenemos y de la ciudad que deseamos, proponemos posibles acciones en función de qué tipo de infraestructuras y tecnologías aplicadas hará falta atraer, incorporar y actualizar. A su vez, creemos necesario incorporar al desarrollo productivo la posibilidad de crear trabajo en conjunto con diferentes actores de nuestra ciudad: el Estado, los sectores empresariales, los sindicatos, las organizaciones políticas, etc.

 

Pensar la estrategia de profundización del desarrollo económico implica reconocer la naturaleza desigual que tiene la estructura productiva. Avellaneda tiene a favor una historia reciente de buena administración, las cuentas públicas están equilibradas y son la base sobre la que ha podido enraizar su modelo de desarrollo. El salto necesario que se requiere dar es el de la planificación: cómo producir las condiciones para el enlazamiento entre las dimensiones fundamentales del cambio estructural. Planificación que habrá que leerla como una intervención sobre una dinámica que, en lo fundamental, funciona de un modo descentralizado y que requiere, por lo tanto, nuevos instrumentos y modelos de implementación. La relevancia histórica de esta planificación se verifica en la naturaleza de los fines que persigue: la movilización de los saberes colectivos y populares para fundar nuevas potencias productivas. 

 

Resulta necesario conocer la utilidad y viabilidad de adoptar nuevas tecnologías de gestión, procesos, dinámicas y articulaciones para el planteo estratégico de medidas y acciones que permitan sostener políticas de mediano y largo plazo. ¿Qué matriz laboral / industrial queremos? ¿Cómo potenciar la industria local? ¿Qué rol cumple el puerto en este desarrollo? ¿Qué oficios hay que desarrollar con más fuerza? Y, por lo tanto ¿Qué talleres hay que promover? ¿Avellaneda industrial? ¿Avellaneda comercial? ¿Avellaneda turística? ¿Avellaneda usina tecnología y de industria cultural? ¿Avellaneda promotora de la soberanía alimentaria? ¿Avellaneda agro-ecosistema periurbano de la ciudad de Buenos Aires? ¿La gestión de Residuos Sólidos Urbanos como alternativa productiva generadora de puestos de trabajo?

 

El abordaje de estos interrogantes, a partir del trabajo concertado en el equipo y valiéndonos de instrumentos metodológicos propios de la planificación, nos permitirá avanzar en el perfil de desarrollo económico-productivo de base sustentable que queremos para nuestra ciudad.